He decidido hacer Política

Me he preguntado en innumerables oportunidades qué voy a hacer al culminar mi carrera, a estas alturas supongo que esta es una interrogante que compartimos todos los que estamos por egresar de un centro de estudios. Les confieso que el camino recorrido para llegar hasta la decisión que tomé no ha sido fácil, he tenido que convencerme personalmente y además, he debido argumentarle a mis familiares y personas más queridas el por qué de escoger este camino. La Política.

Viendo la situación del país, la reputación de muchos políticos y sobre todo, egresando de una prestigiosa Facultad de Ingeniería la decisión carece cada vez más de sentido alguno, es por eso que consulté a varias personas que considero pudieran servirme de referente para tomar esta decisión, pero más allá de eso me di cuenta que en nuestro país hace falta que una nueva generación asuma el reto de transformar y encaminarnos por un rumbo de progreso y desarrollo para todos. Entendí que como jóvenes no debemos permitir que una generación extinta y desgastada pretenda nuevamente dirigir los designios del país; no precisamente cuando existen personas preparadas académicamente, con sueños e ideales honestos y con la esperanza firme e inquebrantable de construir una Venezuela mejor.

Entendí que lejos de lo que creía este camino no lo transito solo, muchos de los compañeros que hemos dado la cara al país desde diversos espacios, hoy nos reunimos nuevamente y ratificamos nuestro compromiso con Venezuela.

Entendí que más allá de depositar culpas y lamentos en cuentas ajenas es hora de trabajar por una Venezuela posible. Es hora de convencernos que juntos podemos lograrlo.

Entendí el miedo de mi madre y mi padre cuando piensan que los que hacemos política en tiempos donde la democracia está seriamente amenazada corremos grandes riesgos. A ellos y a todas las madres y padres venezolanos sólo mes queda decirle que dentro de algunos años se sentirán orgullosos de sus hijos, porque serán ellos los héroes de la patria.

Por ahora estoy cargado de sueños y esperanzas, tengo ganas de salir a cambiar el mundo y hacerlo un sitio de bien, en la ruta he decidido formarme y prepararme porque rechazo profundamente la improvisación que desde mi punto de vista ha sido la única ideología que ha gobernado este país, espero tener más temprano que tarde proyectos y propuestas concretas que nos permitan transformar realidades promoviendo el liderazgo colectivo como salida al caudillismo que tanto daño nos hace. Creo profundamente en el trabajo social, pero no para aprovecharnos de los más desposeídos buscando a cambio un voto, sino para explotar el potencial de cada uno de esos venezolanos y contribuir de esa forma a que superen su situación.

En definitiva, decido hacer vida política porque en Venezuela ya no hay tiempo para preguntarnos qué va a pasar sino más bien para decidir qué vamos a hacer.

RBR.